El 90% de las bajas por enfermedad que se producen en el sector de la limpieza son trastornos músculo-esqueléticos
Según Recursos Humanos RRHH Press, el sector de la limpieza registra un importante porcentaje de trastornos músculo-esqueléticos producidos por factores muy diversos asociados al ámbito de trabajo: movimientos repetitivos, posturas incorrectas y un uso inadecuado de los utensilios de trabajo.
Ello implica que este sector presenta un índice mayor que en otros sectores de dolencias como la lumbalgia, cervicalgia, tendinitis, hombro doloroso, epicondilitis, síndrome del túnel carpiano, tenosinovitis de Quervain, artrosis de rodilla, patologías más comunes asociadas a los trabajos de limpieza profesional.
Según el doctor Santiago de la Fuente, médico rehabilitador, “estas patologías resultan tremendamente frecuentes y ocasionan una media de 15 días de baja laboral”.
En concreto, “el 75% de las bajas que se producen en el sector de la limpieza son imputables a enfermedades, el 25% restante se trataría de absentismo voluntario o bajas injustificadas”, reconoce Jesús Martín, presidente de la Asociación de Empresarios de Limpieza de Madrid, AELMA. Y de ese 75%, el 90% corresponde a trastornos músculo-esqueléticos.
“Afortunadamente, los nuevos métodos de diagnóstico permiten saber si los trabajadores están fingiendo una dolencia y si ésta se ha producido en el centro de trabajo o en el ámbito doméstico”, señala el doctor De la Fuente.
La prevención como aliada
Gran parte de esas enfermedades podrían evitarse o minimizarse ofreciendo a las empresas y trabajadores una correcta formación en higiene postural. Tal y como explica Álvaro Guerrero, fisioterapeuta y codirector del centro médico Premium Madrid, “para ofrecer soluciones, primero hay que analizar los riesgos laborales a los que se expone el sector, que en el ámbito de la limpieza son caídas, golpes, cortes y abrasiones con productos químicos. Seguidamente, hay que aplicar los planes de ergonomía adaptados tanto a la actividad que se realiza como al utensilio de trabajo que se emplea y, finalmente; prevenir y, en su caso, tratar los trastornos músculo-esqueléticos”. En este último caso, resulta imprescindible reducir el tiempo desde que el trabajador sufre un dolor o traumatismo hasta que comienza el tratamiento. Según Guerrero, este tiempo debe ser lo más inmediato posible, “de esta manera reduciremos el tiempo de incapacidad temporal y el trabajador quedará 100% recuperado y sin secuelas”.
Reeducación Postural Global
Para que los trabajadores puedan llevar a cabo los planes de ergonomía deberán aprender, a través de técnicas de reeducación postural global y de control postural, cómo ejecutar su trabajo correctamente, así se evitarán retracciones, acortamientos y contracturas musculares, que se producen por el desempeño de la actividad laboral.
Según Guerrero, “en los procesos crónicos o degenerativos, la prevención es fundamental a través de técnicas como la reeducación postural global cuyos principales beneficios son: ganar elasticidad, mejorar la movilidad articular, mejorar la postura, eliminar contracturas y quitar el dolor, mejorar la respiración, controlar el estrés, aprender a controlar tu cuerpo de manera activa y dar estabilidad a nuestra columna”.
Estas conclusiones se han producido en el marco de una Jornada sobre Prevención de Riesgos Laborales celebrada en Madrid por la Asociación de Empresarios de Limpieza de Madrid.